Durante esta temporada el mayor dolor de cabeza para la dirigencia de Colo Colo sin duda que ha sido Jordhy Thompson. El futbolista de 19 años ha estado involucrado en varios episodios de violencia de género en contra de su expareja Camila Sepúlveda, agresiones que lo mandaron tras las rejas por unos días y que hoy lo tienen con medidas cautelares.
La situación del jugador también ha significado que el directorio de Blanco y Negro no tuviera una postura clara. En las últimas semanas y tras el último episodio, las visiones apuntan a buscarle una salida. Sin embargo, no siempre ha habido una opinión unánime para establecer cómo se producirá.
Por ejemplo, los representantes del Club Social y Deportivo creen que se debe ir sí o sí, independientemente de si hay ofertas, porque consideran que la institución no puede tener en sus filas a una persona que comete un delito tan grave como el de femicidio frustrado por el que está siendo procesado. De hecho, en más de una ocasión, manifestaron en los directorios su temor de que la conducta del antofagastino fuera en escalada y que pudiera atentar contra la vida de su expareja.
Eso sí, en los otros sectores la mirada es menos negativa. De hecho, Aníbal Mosa se mostró comprensivo con el jugador. “No podemos desechar a una persona, tirarla a los leones y olvidarnos de ella, porque este muchacho cometió un error muy grande, lo que hizo es muy grave, tenemos que esperar lo que dice la Justicia y después de eso tenemos que ver cómo recuperamos a este muchacho. Debemos buscar una manera de rescatar al ser humano”, decía hace unos días.
Fue precisamente el bloque del puertomontino el que se opuso a fines de agosto a que Thompson partiera a los Xolos de Tijuana, por considerar insuficiente la propuesta económica del cuadro mexicano, que en un comienzo ofreció alrededor de US$ 300 mil por el préstamo y una opción de compra de US$ 1,5 millones por el 60% del pase.
Mientras que el presidente Alfredo Stöhwing tuvo una postura más cercana a la del Club Social. “Está separado del plantel, no va a jugar en el resto del año. Y, en realidad, como opinión personal, veo difícil que juegue el próximo año también, pero ya veremos”, expresó la semana pasada.
En las últimas horas todo se ha ido acelerando, debido a que el club maneja ofertas de dos clubes: el FC Orenburg de Rusia y el Emelec de Ecuador. El primero busca a través de un préstamo con opción de compra y es el favorito de la dirigencia porque le permitirá jugar en una liga competitiva como la rusa y los montos se acercan a lo que quiere la concesionaria. En la mesa saben que es la última opción para desprenderse de un jugador que todavía es un activo del club. Por eso, la opinión es unánime: se va al extranjero.
Complejo escenario
Si bien desde el Monumental dicen que todavía no está cerrada la partida del nortino a la lejana Oremburgo, señalan que la opción es concreta. Eso sí, antes de cualquier movimiento, los abogados de Thompson deberán pedir una audiencia de revisión de las medidas cautelares, ya que actualmente cuenta con arresto domiciliario parcial, entre las 21.00 y las 06.30 horas, arraigo nacional, firma quincenal ante el Ministerio Público y prohibición absoluta de acercarse a más de 200 metros de la víctima.
Incluso, esta posibilidad causó mucha molestia en las autoridades, como la ministra de la Mujer y Equidad de Género Antonia Orellana, quien manifestó que “existiendo arraigo nacional, aunque sea el Real Madrid, no se puede salir del país” y enfatizó que el ser futbolista no debe significar ningún privilegio ante la justicia. “No hace estar por encima de la ley vigente”, cerró.
Fuente: La Tercera
@EstudioEstadio