El 26 de julio del año pasado, Marco Rojas comenzó a cumplir un sueño de infancia: jugar en Colo Colo. Pese a estar a casi 10 mil kilómetros de distancia, en Hamilton, Nueva Zelanda, el futbolista creció en el seno de una familia chilena, escuchando sobre las grandes hazañas del Cacique. Por eso, tras desarrollar una interesante carrera en el extranjero, para el Messi Kiwi, como se hizo conocido, llegar a los albos era una meta que significaba mucho. Sin embargo, hoy esta historia está cerca de llegar a su final.
Si bien su contrato finaliza en diciembre, tal como reveló TNT Sports, el volante pidió adelantar su salida del club para junio. Detrás de esta determinación hay varias razones que pesan bastante a la hora de tomarlas. Una de ellas es de índole familiar, ya que su estadía en el país la ha llevado a cabo sin sus más cercanos. Según relatan conocedores de la situación, no fue un proceso fácil en los primeros meses. La adaptación a una nueva cultura, el no dominar completamente el idioma y su difícil puesta a punto física complicaron en demasía ese periodo.
Tras superar esos contratiempos, su mejor momento en el cuadro popular fue en la parte final del Torneo Nacional de 2022, donde el jugador fue importante para la obtención del título. Fue figura en el partido ante O’Higgins en el Monumental, dando una asistencia a Gabriel Costa y anotando el 2-0 definitivo. No obstante, su condición física le impidió consolidarse cien por ciento y terminó relegado al banco de suplentes o, derechamente, sin ser citado. Sin ir más lejos, este año suma 167 minutos, repartidos en tres partidos por el campeonato local y uno en Copa Chile.
“Puede marcar más diferencias y ser constante en los 90 minutos. Es un jugador que tiene muchas condiciones, puede jugar por adentro o por afuera. Ha marcado diferencias cuando ha entrado en el segundo tiempo. Cuando jugó, siempre terminó pidiendo el cambio o cansado. Es una deuda pendiente que tiene en cumplir noventa minutos a máxima intensidad”, explicó Gustavo Quinteros, en marzo, al ser consultado por la salida de Rojas de las convocatorias.
Posición incómoda
Por otra parte, la incomodidad de Rojas también se traduce en la posición que ocupa dentro de la cancha, pues el DT prefiere utilizarlo como puntero, mientras que él está acostumbrado a jugar como enganche. No obstante, en ese puesto ya están Carlos Palacios y Leonardo Gil y anteriormente estuvo Gabriel Costa.
Asimismo, en la víspera de su convocatoria a la selección de Nueva Zelandia para jugar dos amistosos con China, el futbolista no entrenó un par de días, aduciendo problemas físicos. Sin embargo, terminó viajando igual y jugando el segundo de los partidos frente a los asiáticos. La situación no cayó muy bien en el cuerpo técnico, pero de todos modos tuvo la opción de sumar más minutos en lo que va de abril, aunque nunca con la chance de pelear una camiseta de titular.
Fuente: La Tercera
@EstudioEstadio