A punta de pistola un árbitro se defendió de los jugadores que lo agredían, en medio de un partido de Futsal, hecho ocurrido en la playa del Cassino, en el estado sureño de Río Grande del Sur, en Brasil.
La singular situación, que finalizó con varios jugadores golpeados, se produjo al final de un partido jugado el miércoles 26, entre los equipos amateurs É Us Guri y el Gaúcho Guimaraes, cuando el juez presuntamente agredió a un jugador que había expulsado minutos antes.
En ese instante, el resto de los deportistas del É Us Guri encararon al árbitro y éste, al verse superado, sacó una pistola con la que encañonó a los futbolistas, y les lanzó golpes con el arma, lo que quedó registrado en un video que posteriormente se publicó en Twitter. (ver más abajo).
La acción del árbitro, identificado como «Mauro», fue el detonante para una pelea en que el «colegiado» se defendió a culatazos y puñetes de los jugadores que se le fueron encima.
Los relatos
Tras la acción en la que se registraron personas contusas pero ninguna baleada. Fuentes de la policía confirmaron que el el juez del partido es un policía militarizado, por lo que las autoridades iniciaron una investigación para verificar posibles delitos de lesiones cometidos por el juez.
Los integarntes de É Us Guri sostuvieron que “el árbitro sacó su pistola que estaba en la cintura durante todo el partido y agredió a dos atletas de nuestro equipo con culatazos”, y que todo supuestamente fue detonado por la agresión a otro de sus jugadores que había sido expulsado.
Los heridos fueron enviados al un hospital, constatándose que uno de ellos recibió tres puntos de sutura en la herida y el otro se desmayó en el traslado.
“Nosotros, del equipo É Us Guri, repudiamos el acto del árbitro del partido, quien debería ser la persona que calma los ánimos de todos los involucrados en lugar de tomar esa actitud muy equivocada”, declararon en un comunicado del equipo afectado, en el que además reconocieron que su compañero expulsado “estaba ofendiendo al juez”, pero que “nada justifica dicho acto”.