Con la sensación de que pudo ser un resultado diferente, y que el DT fue mezquino a la hora de arriesgar, dada la necesidad de sumar urgente que tiene la Roja, que se mantiene en el 7mo lugar de la clasificación, tras el empate sin goles frente a Ecuador
Claro, otra cosa es estar en la cancha, pero lo que mostró la Selección Chilena en la altura de Quito demuestra que el trabajo que está haciendo Martín Lasarte es el correcto, sobre todo tras el partido con Brasil, y ahora con Ecuador.
«Machete» planteó bien el partido, cerrando las bandas, que es por donde Ecuador tiene fuerza y ventaja, sobre todo de local, con un equipo ordenado, jugando en bloque, y en lo posible al contragolpe.
Sin embargo, nada se gana con recuperar y salir muy rápido en ataque sin la falta de gol ya es endémica en esta selección, que aún no logra encontrar a quien resuma en goles las buenas actuaciones de los laterales y los volantes de contención.
El juego
Los ecuatorianos llegaron recién al minuto 15, con un lanzamiento libre que Moisés Caicedo ganó por arriba, e hizo que Claudio Bravo se luciera sacano a su izquierda.
A los 17′ le tocó a Chile, con una entrada de Jean Meneses, quien recibió de Eduardo Vargas, y que fue amagada por el arquero del «Tri», Galíndez.
Así mismo, a los 34′ Paulo Díaz no conectó bien un tiro libre que vino por alto, pero que el defensa desvió por poco hacia la derecha.
En el segundo tiempo, de entrada los ecuatorianos se fueron con todo y nuevamente Caicedo mandó un potente remate que fue contenido por Claudio Bravo.
En uno de los córners para Chile (tuvo al menos 6) a los 55′, lanza Charles Aránguiz, sale mal Pedro Oritz, quien sustituyó a Galíndez por lesión, y Arturo Vidal no pudo finiquitar cómodo de cabeza y luego de eso, desde el suelo.
Roja
A los 62, Junior Sornoza disputa el balón con Claudio Baeza, pero no contento con eso, pisa al jugador chileno, y el pito no dudó en aplicar la tarjeta roja y deja a Ecuador con un menos.
Ese pudo ser el minuto de inflexión, pero Chile no hizo ver la superioridad en hombres, careció de ideas y no pudo marcar la diferencia tan ansiada y necesitada para la Roja.
Tampoco Lasarte se atrevió a salir con todo y los cambios fueron claramente para cuidar el empate, porque los que entraron lo hicieron para contener y no para atacar, y Vargas y Vidal a esas alturas ya estaban cansados, y necesitaban un delantero encarador.
Si bien el punto es bueno -hace 24 años que no se sacaban un buen resultado en Quito-, quedó la sensación de que Lasarte no quiso arriesgar ese punto, para apostar a juego contra Colombia.
El próximo 9 a la Roja le toca con Colombia, y es la última oportunidad que tendrá Lasarte para sumar de a tres, y escalar algo en la clasificación. Eso sí, la amarilla de Vargas complica al DT, porque para este partido vital no estará disponible.
Veremos qué hará el estratego para resolver este nuevo puzzle.