No hay descanso en la crisis que vive Colo Colo. Los dirigidos por Gualberto Jara continúan el complicado momento futbolístico, lo cual se suma una nueva problemática: las millonarias deudas que mantiene la concesionaria Blanco y Negro.
Así consignó La Cuarta en su edición de hoy (25 de septiembre), donde confirman que el fracaso del último año donde Mario Salas fue destituido (A quien se le pagó una indemnización de 480 millones de dólares), Scolari no aceptó la oferta, sumado a la falta de público en los estadios y a la problemática con los jugadores, quienes se acogieron a la Ley de Protección al Empleo, tendrían ahogado a Aníbal Mosa.
A raíz de esto, la deuda que mantiene Blanco y Negro en Colo Colo es de $1.200 millones de pesos, los que se deben pagar al plantel por los meses de abril y mayo, según lo ordenó la Dirección del Trabajo. A esto, se suman otro $500 millones adeudados que se deben pagar a ciertos jugadores por derechos de imagen. Esto habría sido un quiebre al interior de camarín.
Por este motivo es tan importante que Colo Colo logre avanzar a la segunda ronda de la Copa Libertadores, o al menos, terminar tercero en su grupo para clasificar a la Copa Sudamericana. Lo primero es lo que más dinero le dejaría a Blanco y Negro con los premios, pero de igual modo, jugar el segundo torneo aportará para acortar la deuda del club
Fuente: En Cancha